Continuamos con la serie A solas con Dios. En la ultima sesión iniciamos el estudio sobre una de las disciplinas espirituales olvidada en la cristiandad actual: la Meditación. Hoy profundizaremos sobre el deber y la necesidad de meditar en las Escrituras. Dios nos ordena meditar en su Palabra, y el deber primario del Cristiano es obediencia a Dios. Para meditar debemos comprender que cuando leemos las Escrituras estamos ante la voz de Dios, entonces ¿Cómo la leeremos? ¿Con qué frecuencia? ¿Con qué disposición? Recordemos que sin la meditación, no podemos ser cristianos sólidos, y es la herramienta que Dios nos da para profundizar en sus verdades. Los invitamos a ser parte de esta enseñanza necesaria para nuestro quehacer cotidiano como creyentes.

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